Yo soy muy de tomates secos, ya que lo he hecho con mi madre desde bien pequeña y todos los veranos cuando iba de vacaciones a su casa.
Ella me decía que mi bisabuela Paca, los ponía en el alfeizar de las ventanas de su casa a secar. Claro, que ella vivía en el campo y en el Mediterráneo, bastante diferente a las temperaturas y humedad que tenemos por aquí.
Me gusta dar un toque a muchas cosas con ellos, sobre todo cuando ya no están de temporada. Aquí los he metido tipo tropezones en este delicioso queso vegano de untar.
Ingredientes:
- 150 gr de anacardos remojados 8 horas
- 1 cs de miso blanco fermentado o shiro miso (lo encuentras de la marca kensho)
- 1 cs de levadura de cerveza o nutricional
- 1 o 2 dientes de ajo
- Un buen chorro de zumo de limón
- ½ cp de sal marina
- La punta de un cuchillo de chile en polvo (depende de tu gusto)
- Medio vaso de agua filtrada
- 1 tomate seco a trocitos
Elaboración:
- Escurre y lava bien los anacardos y tritúralos muy bien con el resto de los ingredientes en una batidora potente, excepto el tomate seco. Bate hasta que quede una textura cremosa.
- Prueba la crema para saber si hay que equilibrarle algún ingrediente (sal picante, miso, etc.).
- Mezcla la crema con los trocitos de tomate seco.
- Guárdala en un bote y déjala fermentar un día fuera de la nevera. Luego meter en la nevera y dejar madurar un mes.
Puede comerse en cuanto la hagas, aunque el sabor se irá desarrollando más con el tiempo.
¡Que disfrutes!

